Por: Snaider Montes M.
El clamor de las hermanas Meléndez Santoya fue escuchado
El clamor de las hermanas Meléndez Santoya fue escuchado, y la respuesta llegó en forma de una nueva vivienda que transformará sus vidas. Como parte del programa gubernamental para mejorar la calidad de vida de los bolivarenses, el gobernador de Bolívar, Yamil Arana Padauí, entregó una casa nueva a estas dos madres solteras en el barrio Zaragocilla de Cartagena.
Una casa que simboliza esperanza
La historia de Yisaura y Yimaura Meléndez Santoya y sus seis hijos había conmovido a la comunidad y a toda la región. Las hermanas vivían en condiciones deplorables, en una precaria vivienda de madera que se vio gravemente afectada por las lluvias torrenciales del año pasado. La situación se hizo insostenible, pero la solidaridad vecinal y una llamada de auxilio se cruzaron con la voluntad transformadora del programa de vivienda de la Gobernación.
“Estas familias estaban viviendo una situación muy difícil, lo constaté personalmente gracias al llamado de la comunidad y la cobertura de medios como la emisora La Cariñosa. En menos de 45 días logramos reconstruir su vivienda, y hoy están disfrutando de condiciones dignas”, expresó el gobernador Yamil Arana.
Impacto del programa de vivienda en Bolívar
Este noble gesto forma parte de un plan más amplio impulsado por la Dirección de Vivienda de Bolívar, liderada por William García Tirado. Este año, la Gobernación tiene proyectado mejorar 1.000 viviendas y entregar 300 casas nuevas, todas destinadas a las familias más vulnerables del departamento.
La nueva vivienda de las hermanas Meléndez cuenta con sala, dos habitaciones, cocina, baño interno con acabados de calidad, y un amplio patio para que los niños puedan jugar de manera segura. Yisaura, de 21 años, no pudo contener sus lágrimas de emoción al recorrer el espacio renovado. “Cuando el Gobernador nos dijo que cambiaría nuestra vida, le puse fe. Ahora, mi hermana y yo, junto a nuestros hijos, podemos vivir mejor”, declaró.
Yimaura, por su parte, agradeció a todos los que unieron esfuerzos para cambiar su situación, desde las instituciones locales hasta organizaciones como La Cariñosa, El Gigante del Hogar, Fundefava y el Hospital Universitario del Caribe. “Gracias a todos los que pusieron su granito de arena para que hoy tengamos esta bendición”, expresó.
Más allá del hogar: oportunidades para el futuro
Pero el apoyo no se quedó ahí. Además del hogar, los menores recibieron kits escolares y acompañamiento psicosocial. También se impulsaron iniciativas para generar ingresos sostenibles para la familia, como un negocio de alquiler de sillas y mesas para eventos, la venta de helados y una unidad móvil de belleza a domicilio.
Un compromiso con el bienestar de Bolívar
Historias como la de las hermanas Meléndez Santoya son un reflejo del compromiso transformador que la Gobernación de Bolívar tiene con sus ciudadanos. Estas acciones no son solo la construcción de viviendas, son la edificación de un futuro más digno y esperanzador para los más desfavorecidos.
Con proyectos como este, Bolívar avanza hacia un futuro más justo, donde cada familia puede aspirar a una vida mejor, llena de oportunidades y con los recursos necesarios para crecer y prosperar.